Llegamos así al día sábado 15 de junio , jornada de lluvia y viento que no fue obstáculo para que la visita continuara dentro de lo planificado. Luego de compartir la oración de la mañana y el desayuno, continuamos con las visitas. Esta vez le tocó el turno a María del Carmen quien esperaba al Arzobispo para recibir la bendición de su nuevo hogar.
En la tarde continuó la visita, esta vez fuimos a "La Casa de Rita, un hogar para la tercera edad, de ambiente muy familiar en un clima de alegría recibieron la presencia del Cardenal con gran expectativa, si bien el tiempo no fue muy prolongado, se rezó, compartió un te y se impartió la bendición sobre los residentes y quienes tienen la responsabilidad de su cuidado.
De allí nos dirigimos a la Capilla de San Luis en Punta Espinillo, donde la Comunidad esperaba al Pastor para la celebración de la Eucaristía, ya que la semana siguiente se celebra el 21 de junio la fiesta patronal.
Al término de la Misa muy participada, se dio la presentación de los asistentes y también al final se compartió un chocolate.
Retornando a la Barra, pasamos a visitar a una reciente vecina, Gladys que coincidentemente es la mamá de nuestro Cura Párroco el P. Luis
Gladys Mancini, madre del P. Luis |
La jornada finalizó con un encuentro de oración y reflexión en el Templo Parroquial. Allí luego de un momento de silencio y súplicas, se escuchó la opinión del Cardenal Sturla acerca de los desafíos de la Iglesia en la sociedad actual.
Esclareció mucho lo que ha de ser nuestro papel como cristianos en el desarrollo de la misión permanente de la Iglesia.
Domingo 16 de junio
El día comenzó con un apagón internacional (Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay), sumado a un fuerte temporal, lo cual nos hacía presagiar una muy escasa participación en la Misa de despedida.
adversas un buen número de audaces se reunieron para celebrar la Eucaristía,
agradecer por todo lo vivido, comprometerse a continuar en la tarea del Reino, y recibir la bendición y el apoyo de nuestro Arzobispo. La comunidad le entregó un regalo que consistió en una matera y un termo con imágenes alusivas a vivencias de distintos momentos de la vida parroquial.
Hubo tiempo para saludos agradecimientos personales y fotos a granel.
Esta es una primera aproximación y relato de algo mucho más profundo y sentido que en el tiempo que viene seguiremos pasando por el corazón y rememorando para bien de cada uno de los integrantes de la comunidad parroquial.
¡Gracias Daniel por tu servicio y generosidad! Seguimos rezando por tí, tus intenciones y las de nuestra Arquidiócesis.